Resumen:
Durante los 3 últimos años, empresas grandes, medianas, pequeñas y vendedores
informales han considerado al Comercio electrónico (E-commerce) como la herramienta
principal de comercialización de sus productos, por lo que se pretende que los impuestos
recaudados por la administración tributaria sean mayores en los últimos años. Pero según un
estudio previo el e-commerce no es tan favorable en la recaudación de los impuestos, debido a
que existen falencias que no se consideran en el ámbito tributario. Claro es el caso de las
ventas que se realizan mediante redes sociales, no son controladas por la administración
tributaria, es decir no existen proceso que controlen estas ventas informales, lo cual da como
resultado la evasión de impuestos, ya que en muchos de los casos se concretan las ventas,
pero no existe documentos fuentes que abalicen dicho proceso, por tal razón este es un rubro
no declarado al Servicio de Rentas Internas (SRI) y a su vez tiene un impacto negativo en la
recaudación de los tributos en especial del Impuesto al Valor Agregado (IVA).
El e-commerce tuvo su auge en la pandemia del virus COVID – 19, ya que la misma afectó
significativamente a varios sectores, de manera especial al sector comercial, dicho sector tuvo
que enfrentar un cambio brusco de sus escenarios habituales, para ello muchos contribuyentes
tuvieron que buscar varias formas para continuar con sus operaciones, caso contrario llegarían
a la quiebra y posteriormente al cierre definitivo de las empresas.