Resumen:
La actividad turística se aprecia como un eje de desarrollo potencial, de gran
importancia para la futura generación de recursos económicos comunales y de
empleos para la población comunal.
El turismo es una actividad económica, social y cultural de carácter
transversal a la producción general de una zona, que ofrece importantes
oportunidades de diversificar la economía local, de crear negocios de pequeña
espacio, de generar demanda de mano de obra, contribuyendo a promover la
igualdad entre hombres y mujeres, porque otorga empleo a un porcentaje de
mujeres relativamente superior al de otros sectores productivos.
Su principal fortaleza recae en las condiciones naturales del hábitat y el
paisaje y en la presencia de elementos de tipo natural y cultural susceptibles de
ser incorporados a la oferta turística, todo lo cual se genera en un entorno de
características peculiares en el ámbito regional. Ello implica sin embargo, el
desafío de asegurar un desarrollo turístico sostenible que considere la
participación de actores locales y que asegure la valoración de los ambientes
naturales y el resguardo del patrimonio cultural.
En este sentido, el gobierno comunal debe constituir una instancia decisiva
para impulsar el desarrollo del turismo comunal, asumiendo un rol orientador de la
actividad turística local a través de sus propias atribuciones y articulando las de
otros estamentos públicos y privados que tienen un impacto directo en el éxito o
fracaso del lugar, como destino vacacional o recreacional.
El desarrollo del turismo en la comuna no sólo aparece vinculado a otras
actividades económicas, sino también a otras dimensiones del desarrollo local,
como son la sociocultural, ambiental y pública-administrativa, y claramente su
planificación debe estar enmarcada en los lineamientos estratégicos de lo planes
de desarrollo comunal.
