Tecnología de chatbot basado en inteligencia artificial para la gestión de procesos académicos de la secretaria del Instituto Superior Tecnológico Tungurahua.

Abstract

El desarrollo de los medios de comunicación como el internet, sumado al avance acelerado de tecnologías emergentes como la inteligencia artificial (IA), robots autónomos, simulación, integración de sistemas de información, ciberseguridad, cluod, impresión 3D, realidad aumentada e internet de las cosas (IoT), han modificado diferentes aspectos de la cotidianidad y bajo este contexto no se ha excluido la automatización robótica de procesos (RPA), por sus siglas del inglés, la misma permite automatizar tareas digitales que los humanos realizan de manera repetitiva; dichas tecnologías sustentadas en la digitalización han dado origen a lo que hoy denominamos la “Industria 4.0” caracterizada por la utilización de software, sensores, máquinas y componentes interconectados a través de estándares basados en el internet. Según Anón (2020), países como Alemania, Francia e Italia, integran a sus procesos industriales la innovación tecnológica que encamina a las industrias a la llamada “4ta. Revolución Industrial”, misma que se caracteriza por una producción con optimización de tiempos, mayor calidad en los productos, menores costes de producción, mayor seguridad e incremento de la competitividad; a nivel de América Latina, Sanpietro (2020), ubica a Argentina como el país con mayor inversión en el área de la automatización, el Ministerio de Telecomunicaciones del Ecuador en el 2018 presentó sus estudios sobre la implementación tecnológica del país, donde se abordan ejes como la conectividad, software, utilización de tecnologías emergentes, entre otros aspectos que dejan prever la existencia de brechas digitales y de educación tecnológica que soporta la inmersión del país en la Industria 4.0. Díaz (2017) y Sanpietro (2020), coinciden en señalar que la Industria 4.0 se sostiene en la aplicación de tecnologías emergentes, que, junto a la utilización de la electrónica, el software y las redes de comunicación otorgan a las industrias la capacidad de autogestión, toma de decisiones en tiempo real a partir de la gran cantidad de datos recopilados, con la finalidad de lograr una automatización de gran escala, bajo el principio de infraestructuras inteligentes que permiten una mayor productividad al optimizar recursos tanto humanos como materiales.