Resumen:
En 1942 se implementó el primer dispositivo ortopédico activo controlado, el cual consistía
en un sistema accionado mediante un actuador hidráulico para mejorar la movilidad de la cadera
y la rodilla. Posteriormente, en la década de 1970, se introdujo en la Universidad de Belgrado el
primer exoesqueleto, diseñado con la finalidad de proporcionar asistencia a las personas con
parálisis. Sin embargo, este primer prototipo presentó limitaciones en su capacidad de
movimiento. En la actualidad, se ha logrado un mayor avance en esta área mediante el uso de
microcontroladores que poseen patrones predefinidos, los cuales reproducen la actividad
muscular por medio de sensores que interactúan con el cuerpo humano (Font-Llagunes et al.,
2010)
Las férulas ortopédicas son ampliamente utilizadas en diversos casos para prevenir el
movimiento indeseado o insuficiente de las articulaciones del cuerpo humano, con el fin de
contrarrestar deformidades o mantener partes del cuerpo en la posición correcta. Además de
proporcionar soporte y protección a los huesos dañados o tejidos blandos, estas férulas ayudan
a reducir la fiebre, la hinchazón y los espasmos musculares. En algunas situaciones, se utilizan
para corregir una marcha anormal que provoca rigidez en las extremidades inferiores, como las
caderas, rodillas y tobillos. Los dispositivos ortopédicos se distinguen de las prótesis en el
sentido de que no reemplazan un defecto físico, discapacidad, discinesia o alguna parte de ellos,
sino que mejoran o reemplazan, en parte o en su totalidad, las funciones motoras (González,
2011)
Descripción:
In 1942, the first controlled active orthopedic device was implemented, which consisted
in a system powered by a hydraulic actuator to improve hip mobility
and the knee. Later, in the 1970s, the
first exoskeleton, designed with the purpose of providing assistance to people with
paralysis. However, this first prototype presented limitations in its ability to
motion. Today, further progress has been made in this area through the use of
microcontrollers that have predefined patterns, which reproduce the activity
muscle through sensors that interact with the human body (Font-Llagunes et al.,
2010)
Orthopedic splints are widely used in various cases to prevent
unwanted or insufficient movement of the joints of the human body, in order to
counteract deformities or keep body parts in the correct position. In addition to
Provide support and protection to damaged bones or soft tissues, these splints help
reduce fever, swelling and muscle spasms. In some situations, they are used
to correct an abnormal gait that causes stiffness in the lower extremities, such as the
hips, knees and ankles. Orthopedic devices are distinguished from prostheses in the
sense that they do not replace a physical defect, disability, dyskinesia or any part of them,
but rather they improve or replace, in part or in whole, motor functions (González,
2011)