Resumen:
El trastorno de déficit de atención e hiperactividad es una afección crónica que afecta
a millones de niños en todo el mundo y a menudo continua en la edad adulta por lo tanto
incluye problemas tales como dificultad para mantener la atención, hiperactividad y
comportamiento impulsivo tienden a tener baja autoestima y bajo rendimiento escolar.
Esta patología se puede definir, según Sanabra (2019) como un trastorno del
neurodesarrollo que se inicia en edad infantil y cuyas características principales son: la
inatención (no es capaz de prestar atención durante un período de tiempo), hiperactividad
(exceso de movimiento que no se ajusta al entorno) e impulsividad (actos precipitados
que ocurren en el momento sin pensarlo). Como consecuencia, las personas que sufren
este trastorno presentan dificultades para adaptarse a su entorno familiar y escolar.
En el Reino Unido, este trastorno afecta, aproximadamente, a uno de cada 25 niños y
a una de cada 100 niñas. En los niños, el diagnóstico suele hacerse entre los tres y los
siete años de edad, pero los síntomas persisten hasta la adolescencia y la adultez; a veces,
este trastorno solo puede diagnosticarse más tarde. (Bupasalud, 2021).
Descripción:
Attention-deficit/hyperactivity disorder is a chronic condition that affects millions of children worldwide and often continues into adulthood. Therefore, it includes problems such as difficulty maintaining attention, hyperactivity, and impulsive behavior. Children tend to have low self-esteem and poor academic performance.
According to Sanabra (2019), this pathology can be defined as a neurodevelopmental disorder that begins in childhood and whose main characteristics are: inattention (inability to pay attention for a period of time), hyperactivity (excessive movement that doesn't match the environment), and impulsivity (hasty acts that occur in the moment without thinking). As a result, people suffering from this disorder have difficulty adapting to their family and school environments.
In the United Kingdom, this disorder affects approximately one in 25 boys and one in 100 girls. In children, diagnosis is usually made between three and seven years of age, but symptoms persist into adolescence and adulthood; sometimes, this disorder can only be diagnosed later. (Bupasalud, 2021).
